por qué

La queja más común, hoy en día, de profesionales de todos los niveles, es la sensación de que el tiempo no es suficiente. 

​

Cada vez existe una mayor presión por los resultados. Esto implica asumir más responsabilidades, cosas por recordar, compromisos por cumplir, información y documentos por leer, reuniones a las cuales asistir, actividades a las cuales dedicar tiempo y proyectos en los que participar. 

​

Asimismo, cada vez el trabajo es menos individual y más interdependiente. Por ello es necesario hacer un buen seguimiento, tanto de las actividades propias como de las de otras personas con las cuales se trabaja para asegurase de que se logren los resultados de objetivos conjuntos. 

​

Y cada vez hay más interrupciones, distracciones y actividades que nos agobian y nos roban el tiempo que necesitamos para “trabajar”. Esto nos genera sensación de sobrecarga laboral y estrés.

​

Sin embargo, trabajar, descansar, divertirse, comer... todo nos exige tiempo. El reto es cómo manejarlo.

​

Saber planificar el trabajo, aplicar buenas técnicas, estar motivado y tener confianza es esencial para obtener buenos resultados y evitar el agobio.